lunes, 3 de marzo de 2014

La sanación de los rodometafisios


Hay rodometafisios que tenés razón, se destruyen solos nomás una brisa les da vuelta el ahora y se los hace crisis. Pero están los otros, los que se curan a sí mismos caminándose, encontrándose a cada pie con la piedra que se aparta hasta hacerse chiquita, y de tan chiquita de repente se afina en arena blanca que orilla hacia sus otros mares calmos, sin saber cómo ni dónde, y sobre todo no importando.

1 comentario: